Hoy os voy a hablar de un pequeño tesoro natural que la ciudad de Gijón tiene desde hace pocos años: el Jardín Botánico Atlántico.
El jardín es un bonito lugar para pasar el día bien sea con la familia, con los amigos o con los peques si es que se tienen.
Es una delicia de lugar, siempre diferente en función de la estación del año en el que sea visitado. En primavera predomina el blanco de las flores. El arco iris veraniego se torna rojizo y ocre con el otoño, que deja paso al verde brillante del invierno, especialmente bonito después de un día de lluvia.
Hay mucho espacio, está dividido en varias zonas y pasear por él es todo un placer. Incluso se puede comer en su cafetería-restaurante el menú del día por un buen precio.
Es una delicia de lugar, siempre diferente en función de la estación del año en el que sea visitado. En primavera predomina el blanco de las flores. El arco iris veraniego se torna rojizo y ocre con el otoño, que deja paso al verde brillante del invierno, especialmente bonito después de un día de lluvia.
Hay mucho espacio, está dividido en varias zonas y pasear por él es todo un placer. Incluso se puede comer en su cafetería-restaurante el menú del día por un buen precio.
Cuatro son las zonas que se pueden encontrar dentro del jardín:
1º La Factoría Vegetal:
En ella se pueden encontrar diversas colecciones botánicas como por ejemplo: plantas invasoras o plantas medicinales, entre muchas otras. Además, también podemos visitar el área museográfica Quintana de Rionda, que es una casería tradicional asturiana formada por cinco elementos arquitectónicos: La Casa, La Cuadra, El Llagar, El Molino y una Panera. También se puede ver la exposición "Fibras Vegetales. Tejiendo Plantas", la Fuente de Talavera, el laboratorio de suelos y compostera y la colmena de observación.
2º Entorno Cantábrico:
Aquí se pueden encontrar las
colecciones botánicas de bosques cantábricos como robledales,
hayedos, encinares, carrascales, alcornocales, rebollares, también
matorrales, brezales, praderas, helechos y plantas acuáticas y
anfibias. Además, por esta zona cruza el arroyo Peñafrancia y se
encuentra la zona de compra del semillero abierto a todos los
públicos.
3º El Jardín de la Isla:
En esta zona se pueden encontrar topiarias, arbustos ornamentales, plantas orientales, rocalla, plantas acuáticas ornamentales, bonsais, camelias, entre otras muchas. Además también se puede visitar la Fuente de Talavera, la Caseta de Baños con exposición de F. Valdés, el arroyo Peñafrancia, el paseo de las Hespérides, el laberinto de Tejos, la pista de tenis, la Mesona, el Cenador, las Piscina, el Estanque de la Noria y la preciosísima Alineación de Plátanos.
4º El Itinerario Atlántico:
En esta zona, la más extensa de todo el jardín botánico, se pueden encontrar dos tipos de colecciones botánicas: la del bioma boreal europeo con, por ejemplo: bosques de abeto rojo o saucedas boreales, y la del bioma templado europeo con, por ejemplo: una aliseda, un hayedo, y la estrella del lugar: la Carbayeda de El Tragamón, con más de 500 años de historia, la cuál ha sido declarada Monumento Natural en 2003, un magnífico ejemplo de bosque adehesado que conserva carbayos centenarios y algún castaño de fruto, sus leñas son aprovechadas para la producción de carbón vegetal en lo que se conoce como "Las Carboneras".
Es en esta cuarta zona donde podemos encontrar también el pequeño mundo de la diversión para los niños llamado El Bosque de los Niños o Espacio Miruéndanos. Es un espacio a la altura de los niños y niñas, un lugar para la diversión y el aprendizaje en familia, donde explorar, imaginar y descubrir curiosidades sobre el mundo vegetal y el concreto la vida en el bosque. Un fascinante paseo al lado de tejos centenarios, ranas adivinas, además de una zona de juegos custodiada por un espectacular cuélebre.
(Ésta última foto son los abetos que los niños han decorado con corazoncitos de deseos para el nuevo año)
Aquí os dejo el enlace de la web Jardín Botánico y aquí el enlace donde podréis encontrar los horarios de apertura y las tarifas. Tiene un buenísimo precio, y varios días al año es de entrada gratuita, no visitarlo es una pena. Si os gustan las aves, el segundo domingo de cada mes se organizan visitas guiadas a los espacios donde habitan, con explicaciones a cargo del colectivo Carbayera de El Tragamón.
Os recomiendo esta visita, pasear por el Botánico es una experiencia relajante que permite conocer sugerentes árboles, arbustos y matas, mientras se respira aire puro. Si visitáis Gijón o Asturias, debéis incluirla en vuestro itinerario, no os arrepentiréis ;)
Nos leemos ;)
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